Comunicar con precisión y con alma
Mi trabajo combina rigor lingüístico y sensibilidad. A lo largo de los años he aprendido que traducir no va solo de cambiar palabras, sino de entender culturas, intenciones y contextos.
Por eso, en cada proyecto pongo el foco en la naturalidad y la accesibilidad: en que el resultado sea claro, coherente y disfrutable. Me gusta pensar que traduzco para acercar, para tender puentes entre quienes crean y quienes leen, escuchan o miran.